Un hombre “Recuérdame que te enamore” es un tipo de hombre que, más allá de ser o no atractivo, se cree atractivo entre las mujeres. Lo que viene siendo un galán pero con plena afectación del afectado, lo que podría parecer una redundancia pero que no lo es después de todo.
No sabría decir si se lo inventó mi hermana o ya estaba inventado cuando me lo soltó un día, después de contarme un diálogo desternillante entre Caperucita y el lobo que se podría trasponer perfectamente a un tipo “recuérdame que te enamore”. Este diálogo debe leerse impostando mucho la voz, engolándola en el caso del lobo e infantilizándola en el caso de Caperucita:
– Muñeca, ¿Te vienes conmigo detrás de los matorrales?
– ¡A mi mamá no le gustaría!
– A tu mamá le encantó…»
Pues bien ¿Cuál es el arquetipo de un Recuérdame que te enamore? Pues un George Clooney, por ejemplo, y aunque le pegue más la frase “No te importe desmayarte que alguien te recogerá del suelo”, la mirada y la forma de actuar cuando no está rodando hacen de él el perfecto Recuérdame que te enamore. Y en el caso de George Clooney esto se entiende pero en otros no tanto.
Porque la característica principal de un Recuérdame que te enamore no es que el tipo sea guapo, sino que se crea arrebatador. Se le distingue muy fácilmente. Un Recuérdame que te enamore no te da dos besos, sino uno sólo dejando que sus finos labios se posen en el medio justo de tu mejilla. Sus besos valen oro, y por eso no los desperdicia en el aire sino que se asegura de que le lleguen a la destinataria. Recuérdame que te enamore te agarra de la cintura – bien agarrada – para darte su beso en la mejilla y una vez depositado ese beso de oro, baja un poco la cabeza para poderte enseñar el blanco de sus ojos, mientras deja una ceja ligeramente más alta que la otra para susurrar, a un palmo de tu cara, “¿Dónde quieres que te lleve a comer, guapísima?”. Luego pagaremos a medias, pero Recuérdame que te enamore te lleva. Y vamos andando, pero él te lleva.
Recuérdame que te enamore es ese que al abrirse el ascensor a las nueve de la mañana te larga una sonrisa profidén incongruente a esas horas y en ese sitio. Un día me va a pillar espabilada y le voy a decir “oye, que me enamores”. Y a ver qué pasa.
Que lo dejas todo descolocado:) Porque suelen ser bastante inseguros a pesar de lo que aparentan.
Saludos
Me gustaMe gusta
Uf, no, no creas que son tan inseguros. Son un poquillo tontos, pero en el fondo, tienen cierta ternura.
Me gustaMe gusta
Ay qué risa… yo también los llamo WANKERS.
Tenía una amiga, toda highflier ella, con pasta y podercillo, q tenía la manía de enamorarse siempre de estos impresentables y de decir cosas (sabienod lo delicada q estoy) como «me gusta que me saque a cenar y descorche para mí una botella de 300 euros» (a ver, 300 euros de la época.. hace muchos años q la conversación dejó de fluír entre nosotras)
🙂 muxus guapa, y a depilarlos enteros a todos!
di
Me gustaMe gusta
Hombre, hola, bienvenida!
Nunca han descorchado una botella de 300 euros para mí, la verdad. Y creo que no lo consentiría, qué derroche!!.
Sí, a depilarlos, ja, ja 😉
Me gustaMe gusta
Hola,
pues no sè …., mientras me lo pase bien que piensen y sean lo que quieran, je, que yo tendrè lo me apetezca!
Saudos.
Me gustaMe gusta
¡Hola, Lupiga!, ¡Cuánto tiempo, ya te echaba de menos!
Claro que sí, cada uno a lo suyo, que hay sitio para todos.
un abrazo
C.
Me gustaMe gusta
Hay un poodle gigante en el paseo que es un «recuerdame que te enamore». Quiere hacer caer en sus garras a mi linda Elvirita, si está Leny no lo deja ni acercarse.
Me gustaMe gusta
¿Elvirita? ¿No es un poco joven? ¿No será que a su mamá le encantó?
Me gustaMe gusta
(Huy, para el que no lo sepa, hablamos de perros)
Me gustaMe gusta
No, no a mi tampoco me gusta nada de nada!!!
Me gustaMe gusta
Bueno, pues entonces cuidadito con ese perillán.
Me gustaMe gusta
El caso es que esos tipos siempre ligan y al día siguiente «si te he visto no me acuerdo». Parece mentira pero hay tipas que pican. Un beso.
Me gustaMe gusta
No sé. Yo no creo que su objetivo sea ligar. Simplemente, son un modelo arrebatador que, objetivamente, no es tan arrebatador. Los hay casados y con un montón de hijos, no creas. Por eso son recuérdame que te enamore.
Me gustaMe gusta
Madresitaaaa lo has clavado!!! No quiero decir que conozca a «tu» Recuérdame que te enamore, no, sino que de esos hay algunos por el mundo…. jajajajajaja. Me apunto con su permiso o el de su hermana la definición.
Me gustaMe gusta
Me parece muy bien que se la apunte y hasta que la utilice. 🙂
Me gustaMe gusta
Estos deben ser los babosos de toda la vida, ¿no?
Me gustaMe gusta
No, no. Un baboso es otra cosa. Un baboso es un repugnante. Estos son cómicos,yo diría que inofensivos. De un baboso huyes como de la peste y de estos no huyes, simplemente no los buscas y si te los encuentras, pues con hacer por no recordar nada, ya está 🙂
Me gustaMe gusta
Los has clavado. Yo tengo un vecino de despacho que es de esa especie.
Me gustaMe gusta
¿Arturo Fernández?
Me gustaMe gusta
Puede ser, puede ser. En hispano y en un poco más joven, puede ser. Muy bien traído.
Me gustaMe gusta