Jornada de reflexión

Señores, con su permiso, yo empiezo ahora. 

Es que mañana tengo una fiesta y no voy a poder reflexionar convenientemente entre las 20:30 (hora a la que entraré en el cuarto de los milagros) y la medianoche. Luego, a partir de esa hora ya no hay que reflexionar más, por lo que prefiero anticipar la pérdida y no malgastar ni un minuto de esas valiosas 24 horas que la Ley nos concede (¡gratis!).

Hasta el domingo, pues.

Gracias por dejar un comentario.

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s