Todas las mañanas, Reggie daba un paseo por la calle principal de Climthorpe, donde había siete sociedades de préstamo pero ni un sólo cine: Sic transit Gloria Swanson»
Le pedí a mi librera favorita que me diera algún libro que no me hiciera pensar mucho y con el que me pudiera reír un rato, miró la estantería y cogió este libro. “Lee esto, me dijo, te hará reír”. Y sí, El regreso de Reginald Perrin es un libro para sonreír y para reír, a veces con una carcajada, a través del absurdo y de situaciones descabelladas en un entorno de personajes completamente disparatados.
Esa vida nueva pasa por un breve trabajo en una granja de cerdos, hasta que decide crear su propia empresa, Basura, al principio una simple tienda en la que vende todos los objetos inservibles y desechables que va encontrando a su alrededor y, con el paso del tiempo, una exitosa cadena en la que fabrican expresamente artículos absurdos y que no sirven de nada. Y no crean, que cuando le flojean las ventas aplica una solución infalible: sube los precios, y las ventas vuelven a su ser.
El libro está lleno de diálogos descacharrantes y de personajes estrafalarios, y sus trescientas y pico páginas se leen sin querer, pasando desde luego un muy buen rato.
Por lo visto hubo una serie de televisión hace muchos años basada en estos libros y en este personaje. Yo no conocía la serie, o tal vez no la recordaba, y supongo que ahora nos parecería, como todas las series de los años 70 u 80, un poco anticuada (he visto algún trailer en YouTube y da un poco de pereza, la verdad). Sin embargo, el libro vale la pena. Léanlo si se lo topan.