El gesto y las gafas

Ya les hablé en otro post de mis tribulaciones con las gafas, un elemento decorativo de mi personalidad con el que llevo conviviendo desde los 18 años, aunque he de decir que está pasando de ser una herramienta de descanso a una de supervivencia a pasos agigantados.  El señor oculista tenía razón (CLICK), aunque tal vez demasiada, y ahora ya estoy del todo convencida de que con ellas veo mucho mejor además de evitar tener que comprarme un gadgeto-brazo cualquier día de estos. La cuestión es que esta mañana me he topado con un artículo en la prensa que se titulaba «El lenguaje de las gafas» y me lo he leído, por supuesto. Hasta he tomado notas, no crean, que últimamente no tengo yo mi memoria para otra cosa que no sean números.

Así que he anotado que cada gesto que se hace con las gafas dice algo de nuestra autoestima y de nuestra actitud en una conversación. Si jugueteas con las gafas significa que estás eliminando el estrés y la ansiedad, y ya me figuro yo que si tienes mucho estrés, las gafas pueden salir volando en cualquier momento. Morder una patilla indica seguridad, es un acto de autoafirmación. Nunca hubiera pensado que el estado lamentable de la patilla derecha de mis gafas tuviera nada que ver con mi legendaria seguridad en mí misma. Limpiar las gafas es una forma de ganar tiempo, igual que quitártelas, de manera que si ves a alguien hacer eso, mejor cállate. Luego, cuando te las vuelves a poner, es cuando quieres escuchar, volver a «ver» de nuevo las cosas, así que si hace eso tu interlocutor, aprovecha y lárgale el rollo. Y mirar por encima de las gafas es percibido como un juicio y aunque reconocen que, como yo, muchas personas usan gafas para ver de cerca y se ponen las gafas en la punta de la nariz cuando revisan un documento, recomiendan vivamente no hacerlo si no estás juzgando y no quieres incomodar a tu interlocutor.

Y ahora estamos en el restaurante. ¿Han elegido ya los señores? Quítate las gafas y ponte a limpiarlas. ¿Puedo recomendarles el fuera de carta? Ponte las gafas. ¿Les tomo nota? Quítate las gafas. ¿Qué vino tomarán? Muerde las gafas. ¿Van a tomar algo más? Las gafas en la punta de la nariz.

Y ahora estamos con el jefe en la entrevista de evaluación anual. ¿Cuáles son tus logros del año? Quítate las gafas y ponte a limpiarlas. ¿Revisamos el cumplimiento de objetivos? Ponte las gafas. ¿Cuál es tu balance anual? Quítate las gafas. ¿Qué objetivos esperas al año que viene? Muerde las gafas. ¿Miramos tu bonus? ¡Gafas a la nariz!

Ay, qué tonteridas, que dirían en el Blasco.

PS: No puedo enlazaros el artículo porque hoy ya he llegado al máximo de difusión en el Orbyt y no lo encuentro en la página web del periódico. Sin embargo os enlazo este otro que dice las mismas cosas (yo diría incluso que en el Expansión lo han fusilado, porque algunos párrafos son idénticos). Por si tenéis interés (CLICK).