– ¿Si?
– Oye, guapetón ¿No me invitarías a un café, que si me leo a pelo el petardo que me ha pasado el jefe se me va a caer la cabeza?
– … ¿Quién es?…
– … Soy… Eh… A ver, ¿No es el 791?
– No, es el 701… Hola, Carmen…
– Ah…, hola (pongan aquí el nombre de su jefe), perdona, se ve que me he confundido.
– Eso creo yo, porque a mí no me llamas guapetón.
– No, eso es verdad, a ti no te llamo guapetón.
– Tómate un café, será lo mejor.
– Sí, será lo mejor.
Un mundo para Curra 
Jaja. El café lo arregla casi todo.
Suerte que en esos edificios modernos de hormigón no se te puede tragar la Tierra.
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Se te traga la tierra o cualquier cristalera 🙂
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¡Glups! … ¿Se leyó el petardo solo o con leche?
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El petardo me lo leí yo, por supuesto. Y hasta me lo aprendí.
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Jajaja, me has alegrado la mañana, Carmen. Primero le cae un marrón u luego se monta una cagada. Le va el Brown…
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Me alegro mucho. Y me va, me va. Pero no pasa nada, estas cosas se resuelven siempre con naturalidad 🙂
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Lapsus. Carmen, no te trato de Ud., te tomé por el jefe. Creo que mi versión te era claramente más favorable. Y también creo que tengo algún problema de compresión lectora. Nada que no se pueda arreglar con unos cuantos libros…
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Bueno, o yendo con menos prisas, que eso le puede pasar a cualquiera. 🙂
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Bueno, al menos el jefe tenía sentido del humor.:) Un beso.
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Desde luego. Si no, qué horror.
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Jajajá. Ups! Muy divertido!
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Eso me pasa por marcar sin haberme tomado un cafe 🙂
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Jajaja, por lo menos te dio permiso para el café, jajajaja
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Me dio hasta su bendición, XDD.
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Uuuuuuuhh, qué bochorno! A mi esos momentos me disparan la tensión y acabo con un dolorazo de cabeza, no falla.
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¡Qué va! Al menos no me preguntó con quién quería hablar…
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Mejor una tila.
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No, un café con leche muy cargado, que lo cortés no quita lo valiente.
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Glups!
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Eso era lo que yo quería hacer, pero con el café. No pasa nada 🙂
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Ay, pobre. Aunque el post es muy divertido.
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No pasa nada. Hay que reirse de estas cosillas.
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¡¡¡Qué fuerte y que divertido!!!
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