Chile en la Constitución

Para que el presidente de Chile, el Sr. Piñeira, soldara a un país bajo la emoción de himno y bandera y todos nos enteráramos de lo que es un país compacto y unido ante la dificultad, un derrumbe tuvo que mantener atrapados a una treintena de mineros en el fondo de la tierra durante dos meses. Ellos, los mineros, tenían poco oxígeno pero a quienes más nos costaba respirar era a los que estábamos fuera, durante un rescate conmovedor hasta las lágrimas y con un final que, aun en el caso en que no hubiera sido feliz, hubiera sido igualmente heroico y en consecuencia, bello.

En España somos más sencillos, que es la forma elegante de decir más simples. Como cantaba Mecano, sólo cuando nos comemos las doce uvas «entre pitos y gritos los españolitos hacemos por una vez algo a la vez«. Al talento de Nacho Cano no le hubiera supuesto dificultad, creo yo, incluir «soplamocos» en el argumento. Bastaría con añadir a la rima que aquí, patriotas, hay pocos.

Y es que después de tanto Madrid-Barça plagado de empujones, tanganas, teatros infantiles y gesticulación macarra, y ante el riesgo de estropear la única alternativa creíble a las doce campanadas en lo que concierne al fomento de la unidad nacional (me refiero a la Selección española de fútbol, claro), ha venido Chile al rescate de la Madre Patria para que podamos superar este nuevo cainismo inventado por un merengue amargado y un culé empalagoso (me refiero a Mou y al Pep, claro). La vida es así, señores: nada mejor que darse de yoyas con un enemigo exterior para que renazca la épica, el orgullo y el sentimiento de pertenencia cuando éste se encuentra en riesgo. Y si el partido es amistoso, mejor para mostrar compromiso con los colores: los españoles cuando nos motivamos, nos motivamos. Además de Mecano, Shakira también nos aportó luz con el Waca-waca: you’re a good soldier, choosing your battles… ¡Porque esto es Africa!

Ahora que van a toquetear la Constitución, tal vez deberían aprovechar para incluir  a Chile como razón, referencia y recuerdo de la unidad y armonía entre españoles. No sé, yo lo propongo para sacar algún provecho a la tangana de ayer, dado que el partido ya estaba ganado. Y también porque nos será difícil encontrar episodios autóctonos para el orgullo nacional, porque aquí ya no hay mineros ni en Rodiezmo. Les dejo con el vídeo, que es muy bonito e instructivo.