Es conocida la frase de que en el mundo hay mentiras, grandes mentiras y estadísticas. Y que por eso, si yo me como un pollo y usted ayuna, resulta que cada uno se ha comido medio pollo.
Nos dicen con gran alharaca que en el Túnel de Guadarrama han instalado el primer radar por tramos de España. ¡Córcholis! Yo no me meto ahí ni loca, eso no puede ser bueno para la salud, me digo. Porque imagino una nube de protones rodeando el coche, una ráfaga de microondas persiguiéndome, siete vectores de radiofrecuencia adosados a las ruedas o millones de flashes fotovoltáicos disparando sin cesar a la matrícula desde que entras hasta que sales.
La realidad es mucho menos sofisticada. Con dos fotos y un cronómetro, arreglado. Como hay 3,5 Km, si sales del túnel antes de 2,1 minutos es que has sobrepasado los 100 km/h, y te multan. Pero volvamos al pollo. Si mis cálculos no fallan, tú puedes ir la mitad del recorrido a 200 y la otra mitad a 60, y no hay multa. Si quieres ser menos extremo, puedes hacer la mitad a 120 y el resto a 90, y luego pones carita de bueno para el clic…
O sea que, en rigor, no te multan por ir rápido, sino por salir pronto. Y no es lo mismo. Como en el viejo chiste: no es lo mismo «Tejidos y Novedades en el piso de encima» que «te jodes, no ves nada y encima te pisan«.